P.D. Sreedevi, Dewashish Kumar y Shakeel Ahmed, del Instituto Nacional de Investigación Geofísica en Hyderabad, India, han comprobado cómo la conductividad eléctrica en ciertos puntos del terreno rocoso, registrada antes y después de la estación de los monzones, puede revelar diferencias que permiten saber dónde se acumula más agua en depósitos naturales del subsuelo.
Al comparar los datos con otras mediciones geológicas y con los resultados de experimentos de perforación, el equipo es capaz de establecer una correlación entre los datos de la conductividad eléctrica y los puntos con una presencia importante de agua subterránea, sin tener que ejecutar perforaciones adicionales para averiguarlo.
Conocer bien los acuíferos de zonas de roca dura pasa por conocer bien la hidrología de las rocas fracturadas y otros detalles del medio subterráneo.
Los datos se obtienen comúnmente haciendo perforaciones de prueba o inspeccionando el subsuelo a través de aberturas naturales. En uno y otro caso, se trata de un trabajo no exento de peligros, que consume mucho tiempo, y que no necesariamente revela la ubicación más adecuada en la que abrir un pozo.
(Foto: NCYT/JMC)
Sin embargo, las anomalías en las mediciones de la conductividad eléctrica hechas en varias zonas podrían ser útiles para hallar las fuentes más abundantes de agua subterránea.
Los investigadores han demostrado la eficacia de esta estrategia, al correlacionar con mediciones clave la información de 25 pozos en la Cuenca de Maheshwaram, situada en el distrito de Ranga Reddy de Andhra Pradesh, India, a unos 30 kilómetros al sur de Hyderabad, con una superficie de unos 60 kilómetros cuadrados. La zona es semiárida con un promedio anual de precipitaciones de 750 milímetros. El lecho de roca es mayormente de granito.
Fuente Original: Noticias del Espacio