domingo, 22 de mayo de 2011

Un tapir y un bóvido de hace 3,3 millones de años



Un tapir y un bóvido de hace 3,3 m. de años
En la novena campaña de excavaciones en el yacimiento del Camp dels Ninots, en Caldes de Malavella, bajo la dirección de tres arqueólogos del IPHES (Instituto Catalán de Paleoecología Humana y Evolución Social), han desenterrado dos esqueletos intactos de un tapir y un bóvido de hace 3,3 millones de años.

Estos dos grandes vertebrados deben sumarse a los ya hallados anteriormente en este yacimiento, un tapir, un bóvido y un rinoceronte. Según los expertos, los restos pre-históricos encontrados están perfectamente conservados gracias al tipo de sedimento y sobre todo a la composición del agua, muy mineralizada, que ha permitido que los huesos se fosilizaran y se conservaran intactos.

Se ha podido detallar que el tapir, un antepasado de los que actualmente residen en Sudamérica y Asia, pesaría unos 250 kilos, tendría un metro de altura y dos de longitud y es el más completo fósil del registro Europeo y “se trata de un animal muy importante ya que proporciona abundante información Paleoecológica", indicó el codirector de la excavación, Gerard Campeny. El bóvido, muy parecido pero mayor que los actuales antílopes, conserva intactos los dos cuernos y pesaría unos 600 kilos.

En esta campaña, los restos paleobotánicos también han sido muy abundantes, y se han documentado por ejemplo, miles de restos vegetales como hojas, frutos, troncos y centenares de huesos de tortugas, peces, ranas y tritones, evidencias directas del clima y paisaje del pasado. Paralelamente, también se está interviniendo a niveles mucho más modernos, en el Pleistoceno Superior, en los que se ha recuperado abundante industria lítica que aporta informan sobre cómo eran las últimas sociedades cazadoras y recolectoras del Paleolítico superior en la comarca de la Selva.


Fuente Original: Noticias de Ciencia - ELMUNDO.es