Los exoplanetas de mayor interés no muestran señales de civilizaciones inteligentes – por el momento.
El
descubrimiento de un número creciente de exoplanetas potencialmente
habitables, añade un poco de pimienta a la búsqueda de inteligencia
extraterrestre. Por primera vez, los astrónomos pueden dirigir la
búsqueda hacia estos planetas, con mayores probabilidades, en lugar de
apuntar hacia las estrellas sin rumbo fijo.
Hoy, Jill Tarter, del Insituto SETI, y famosa por Contact,
junto con un grupo de compañeros, revelan los resultados de su primera
búsqueda directa, llevada a cabo entre febrero y abril de 2011.
Estos
chicos apuntaron el telescopio de Green Bank, en Virginia Occidental,
hacia 86 estrellas que alojan exoplanetas, descubiertos por el
telescopio espacial Kepler. Escogieron estos objetivos debido a que
tienen exoplanetas en la zona de habitabilidad y tenían cinco o más
exoplanetas, o super-Tierras, con órbitas relativamente largas.
Kepler 22-b
Tarter
y compañía observaron señales en el rango de los 1-2 GHz, la región
usada por los teléfonos móviles e inalámbricos en la Tierra. En
particular, buscaban señales que cubriesen un espectro no mayor de 5Hz,
dado que no hay ningún mecanismo natural conocido que produzca unas
señales en una banda tan estrecha. “Las emisiones de apenas unos pocos
Hz de anchura espectral son, hasta donde sabemos, un indicador
inconfundible de ingeniería por parte de una civilización inteligente”,
dicen.
El
gran desafío con este tipo de observaciones, es descartar los falsos
positivos generados en la Tierra. Tarter y sus colegas desarrollaron una
técnica basada en la simple idea de que una señal solo puede ser
interesante si aparece en los datos mientras el telescopio están
apuntando a la estrella objetivo, pero no cuando el telescopio apunta
hacia cualquier otro lugar. “Esto excluye el 99,96 por ciento de las
señales candidatas”, comentan.
Esto nos dejó 52 señales candidatas, que Tarter y compañía estudiaron buscando signos de un origen terrestre.
Sus conclusiones son directas. “No se encontraron señales de origen extraterrestre”, señalan. Sin
embargo, hay algunos avisos importantes. En particular, la cuestión de
la potencia de las señales que puede captar el telescopio de Green Bank.
Tarter
y sus colegas consideran, en particular, el haz más potente que pueden
emitir al espacio los humanos: el Radar Planetario de Arecibo, en Puerto
Rico. Dicen que, si se apuntase hacia la Tierra un haz similar, lo
habrían observado a una distancia de hasta 10 000 años luz. Por
supuesto, la probabilidad de una coincidencia tan feliz, es pequeña.
Las
civilizaciones más avanzadas podrían tener más potencia disponible, y
ser más fáciles de observar. En particular, las civilizaciones que hayan
aprovechado toda la energía de su estrella – las conocidas como
civilizaciones de Tipo II Kardashian – deberían ser fácilmente
observables.
Los
resultados permiten que el equipo establezca límites restrictivos a las
civilizaciones de Tipo II Kardashian. Tarter y compañía dicen que el
resulta negativo implica que el número de estas civilizaciones que
emiten en el rango de 1-2GHz rdebe ser menor a uno en un millón por cada
estrella similar al Sol.
Esto
nos deja aún mucho campo de estudio, y el equipo señala que la rápida
mejora de la tecnología en sensores de señales de radio, indica que los
investigadores deberían ser capaces de estrechar estos límites
significativamente en un futuro no muy lejano.
Fuente: Ciencia Kanija - The Physics ArXiv Blog
No hay comentarios:
Publicar un comentario